domingo, 16 de noviembre de 2014

Roma-4

Unas últimas fotos de Roma.

























Setas

El pasado fin de semana fuimos en busca de setas. Tuvimos suerte y la lluvia que amenazaba no cayó hasta que ya casi habíamos terminado. Pasamos un día muy agradable en compañía de Teresa y Joan.
Ahí van 5 fotos de algunos ejemplares y de todo lo que recogímos, principalmete níscalos y algunos boletus y parasoles.










domingo, 26 de octubre de 2014

Vacaciones en Roma 3

Empezamos el día con dos temores: el primero es el de no saber si llegará el autobús que nos tiene que llevar al Vaticano. Roma es así, lo mismo llegan tres autobuses de la misma linea de forma consecutiva a la parada, como estamos 40 minutos esperando y nos tenemos que marchar desesperados por que no aparece ninguno de la linea que esperas.

Los romanos son más prácticos, se montan en el primero que llega, parece que todos les vienen bien.

Tenemos suerte, en 7 minutos llega nuestro autobús, el 62. Estamos a puntos de llegar al Vaticano. ¿Suerte? ¿Pero no decían que no se pagan los autobuses en Roma? Suben tres super-polis al bus y piden los billetes a un grupo de turistas que parecen griegos. Les cascan 50 euros de multa a cada uno por no llevar billete. Durante el revuelo que se monta nosotros picamos a escondidas el billete que afortunadamente llevábamos. Nos libramos por los pelos.

El autobús nos deja dos paradas antes del final, nos sabemos por qué. Parece como si el conductor se negara a seguir conduciendo. En fin ... esto es Roma.


Segundo temor: arriba tenéis la foto. ¡Nueve menos diez de la mañana y casi dos km. de cola! Tras dos horas y 15 minutos entramos en los museos del Vaticano. Si no es por Silvia y Héctor (una pareja de Caspe, Zaragoza, que estaban delante de nosotros) hubiese sido insufrible. Gracias a su conversación no se nos hizo demasiado largo.

Cuando logramos pasar te entra la obsesión por llegar a la capilla Sixtina. Todos los carteles te indican el camino hacia ella.


Es una trampa; vas pasando salas y salas casi sin mirar con el objetivo puesto en llegar hasta dicha capilla. Cuando te das cuentas te has pasado medio museo. Así consiguen que pueda entrar tanta gente.

No calmamos un poco y empezamos a mirar todo más despacio. Ahí van unas fotos de las salas decoradas por Rafael:







Esta de debajo es para que os fijéis que algunas de las estatuas que aparecen en las paredes no son tales, que son pinturas. Pero hasta que no estás cerca de ellas, te hacen dudar. Parecen tener volumen.


Algunos de los adornos que usan por aquí;


Las herramientas también son especiales: Piqueta y paleta de oro y marfil y ladrillo ... no sé de qué.


Jarrones como los de nuestras casas:


Mercedes, asombrada mirando techos:


Al llegar por fin a la capilla Sixtina, una pequeña decepción: muy alta, mucha gente y mucho dolor de cuello para mirar hacia arriba. Bonita.

De ahí nos llevaron a una especie de sumidero que nos echó directamente a la calle. Adjunto prueba:


Y fin de los museos Vaticanos.

Despues de comer intentamos visitar la Basílica de San Pedro, pero la perspectiva de una nueva cola nos desanimó. ¿Lo intentaremos otro día?

Vez el ambiente y la mitad de la cola, que toda no me entra en la foto.


Aunque al paso de Mer parece que se van abriendo los mares de gente: ahí va ¡sola entre tanta multitud!


Nos tomarnos un café y un helado por los que nos "clavaron". Creo que en algunos sitios, cuando te ven que eres turista, cobran lo que les da la gana. (4 euros cada café y 7 euros una copa de helado)

Luego visitamos algunas de las que por aquí llaman iglesias, pero en su interior cabría la catedral de Salamanca. Ved si no:




Y para terminar el día un agradable paseo al atardecer y a cenar.

A pesar de las aventuras y desventuras, todo muy bonito.


Chao bambinos.

sábado, 25 de octubre de 2014

Vacaciones en Roma 2

Empezamos el día muy animados. Tanto que nos alquilamos un ferrari para recorrer los jardines de la villa Borghese e ir a visitar su galería de esculturas y pintura. 


No me gusta hacer fotos en los museos por la falta de luz. Pero no me pude aguantar ante tanta belleza y a pesar del grano que aparece en las fotos, os pongo algunas:

Fijaos en el detalle de la presión de las manos sobre el cuerpo, ¿mármol o carne de verdad?



Casi todas las mejores esculturas eran obra de Bernini y Canova:







Dos de los techos de la galería Borghese, todos espectaculares:




Autorretrato en el que se ve algo de la habitación y ¿esa sombra? ¿Seran Mikel o Helio tras "el clásico"? Ummm



Detalle de una puerta:


Y dos cuadros de la colección de pintura:




Despues de los museos (por cierto, el museo Doria Pamphili impresionante y con poca gente en su interior) nos fuimos a pasear por la ciudad. Las tiendas muy bonitas y de nivel: las de ropa y zapatos muy elegantes pero en general muy caras. Creo que el precio medio de los zapatos de los escaparates andará por los 250 euracos y muchas, pero muchas prendas de ropa, pasan de los 500 euros, incluso en tiendas que no son del centro.

También nos sorprende ver que no hay casi locales comerciales cerrados. Y pizzerias ... más que bares en Salamanca, que ya es decir.

Tras ver tanto cuadro nos compramos uno en este puesto callejero: el que casi no se ve en la foto, el paisaje otoñal que está debajo del la marina. Tras un fuerte regateo por parte de Mercedes.


Tienda de corbatas y de antigüedades:





Las plazas, todas con su fuente y muy animadas. Aquí la Plaza do Popolo:


Detalle de una fachada romana: como les sobran los restos arqueológicos los usan de adorno.



Para terminar un sencillo autorretrato en pareja y una de las muchas iglesias que usamos para descansar un ratito cuando estamos agotados de tanto patear:



Nos espera el Vaticano. ¡Qué miedo a las colas!

Arrivederci.